Gabrielistas 1xDÍA

I hear the sound of change, it's everywhere they're tryin' to hold me down, but I don't care whatever they say, I believe in me why am I the only one to see I won't give up and I won't give in where it ends is where I begin but am I really, am I really strong enough And all I can do (x3) is try Oigo el sonido del cambio, está en todas partes. Tratan de hacerme sentir mal, pero no me importa. Confío en mí, sin importar lo que digan. ¿Por qué soy el único que lo ve? No me rendiré y no cederé. Donde todo termina, es donde yo comienzo. Pero ¿en realidad, soy tan fuerte? Todo lo que puedo hacer (3) es intentarlo. Momentos de agobio, de puertas cerradas, de falta de sentido, de ganas de huir. No pares, sigue adelante. O para y piensa, pregunta, contrasta y escucha. O date la vuelta, desanda camino y vuelve donde comenzaste. O salta, supera el obstáculo y continúa caminando. O pon fin a tu camino. Sea cual sea el motivo, mira hacia...

Acababan de ver por la TV un programa en el que la gente donaba dinero para personas necesitadas. El joven seguidor comentó: - Todavía hay gente buena que es capaz de ayudar a los demás. El sabio sonrió pícaramente y dijo: - Sí, la limosna está muy bien; pero a veces sólo es una forma de acallar nuestra conciencia y de dejar que las cosas sigan sin cambiar. Ante la mirada de estupor del joven, el anciano prosiguió: - A menudo, ese dinero que damos es el fruto de las injusticias que cometemos y, en realidad, no nos pertenece. Hay que ayudar con dinero, sí, pero, sobre todo, hay que luchar por cambiar nuestra sociedad. Tenemos que cambiar nuestra forma de vivir, que es la que hace que unas personas tengan más que otras y que el dinero se acumule en unos pocos bolsillos. Hemos de dar dinero…,pero también hemos de dar nuestras vidas para cambiar el mundo. Si no, lo único que conseguimos es acallar nuestra conciencia.                 ...

Tan lejos de ti mismo, tan lejos de los pobres, tan lejos de Dios, tan lejos de los tuyos, tan lejos ¿de qué?, pero siempre lejos de realizarte, lejos de ser feliz, lejos de hacer algo que merezca la pena. Hacer algo es cambiar. Pero el cambio ha de ser global…, empezando por cambiar nosotros. No puede existir una revolución sin un cambio radical en nuestras vidas. Hemos potenciado el tener, el dominar, el disfrutar... sobre el ser, el compartir, el servir, el esforzarse...y nos hemos dejado engañar.  El camino es largo. Las luchas y las protestas no son absurdas, pero pueden acabar en nada si no continúan con nuestro esfuerzo, nuestro cambio, nuestra lucha diaria, para crear una sociedad con sentido.  Toma el tren del cambio, aún estás a tiempo.  No pretendas cambiar todo el mundo, pero en el trozo que te corresponde... marca la diferencia. ¿Qué cambio quieres ver en tu vida? ¿A quién te tienes que acercar?