En medio de una sociedad asfixiada por el desánimo y la incertidumbre, es urgente abrir vías, caminos a la esperanza. Debemos tomar conciencia del gran papel que desempeñamos cada persona, cada comunidad, cada grupo en este momento de la historia en el que vivimos. Y recordar que a través de nuestros gestos, opciones, actitudes, somos anuncio de esperanza para otros.
Por ello os proponemos vivir este tiempo de Adviento en clave de esperanza, a través de la puesta en práctica de propuestas como estas:
Dando prioridad a las relaciones con los demás, al tiempo que les dedicamos; saliendo a su encuentro, tomando la iniciativa, acogiendo y escuchando.
Consumiendo con nuestros cinco sentidos. El comercio justo es una buena opción para acercarse a realidades de otros países y colaborar con una economía sostenible para los productores y sus familias. De esta forma, es posible llenar estas fiestas de algo más que de regalos y ser esperanza para otros.
Compartiendo algo de nosotros con los que más lo necesitan, nuestro tiempo, nuestros bienes, nuestras habilidades… y dejarse tocar por su realidad.
¿Os animáis a realizar alguna actividad relacionada con estas propuestas? ¿Tarjetas de Navidad para las residencias de ancianos u hospitales? ¿Mensajes de esperanza por vídeo? ¿Participar en otras campañas a parte de la operación kilo (recogida de juguetes, de ropa)?...
La esperanza del día a día comienza con una buena reflexión, preferiblemente audiovisual.
ResponderEliminar2ºESO San Gabriel Aranda. =)