"Cuando amas a alguien aceptas a la persona completa, con todos sus defectos".
- ¿Se puede amar a alguien tal como es, o hay límites en lo que debemos tolerar en una relación?
- ¿Cuál es la diferencia entre amar a alguien con sus defectos y permitir que esos defectos te hagan daño?
Sin duda alguna, esta frase nos invita a reflexionar sobre si el amor auténtico implica abrazar tanto la luz como la sombra de cada uno. Y no me refiero a justificar lo que nos hace daño, sino de reconocer que nadie es perfecto y que el amor —ya sea de amistad, de pareja o incluso el amor propio— quizá nace cuando dejamos de buscar la perfección y empezamos a valorar la verdad de cada persona. ¿Te imaginas alguien amándote así tal y como eres? Sí, sí, con todo lo bueno y todo lo malo, con todos tus logros y también tus cicatrices. Los cristianos experimentamos ese amor a través de Jesús. ¿Te lo habían dicho alguna vez? ¿Y si ese amor también es para ti?
Comentarios
Publicar un comentario
Comparte tu opinión de manera responsable y evita el anonimato: Escribe tu nombre, el curso y tu cole gabrielista. Muchas gracias.