Las relaciones humanas pueden ser complejas, sobre todo cuando nos abrimos a lo desconocido, un nuevo grupo de personas, un cambio de colegio, un nuevo hogar... Sin embargo, sea cual sea la situación, tu presencia ilumina ese sitio y cuando esta presencia se une a las otras nace un nuevo mundo, uno en el que todo queda iluminado. Si algo quiere transmitir este cortometraje es -a mi parecer- que eres único y única. Sin ti el mundo cambiaría, tu luz se desvanecería y perdería sentido. Esto no es una frase bonita, para un cristiano es una verdad: el mundo te necesita para que le muestres tu luz. ¿Y si estás aquí para algo? ¿Descubrimos cuál es tu luz?
Comentarios
Publicar un comentario
Comparte tu opinión de manera responsable y evita el anonimato: Escribe tu nombre, el curso y tu cole gabrielista. Muchas gracias.