¡Buenos días!
A veces el dolor no se ve. Se esconde detrás de una sonrisa o en un “todo bien” que en realidad no lo está. Esta canción nos habla de esas miradas que pesan, de esas voces que se apagan cuando nadie escucha. Nos recuerda que el respeto no son palabras bonitas, sino gestos: una mirada que acompaña, una mano que protege, una voz que se atreve a decir “basta”.
Este canto nos invita a pensar en que cada uno de nosotros puede ser ese escudo, ese abrigo que la canción menciona. Porque cuando caminamos juntos, nadie se queda solo. Dime, ¿a quién podrías mirar con más cariño o con más atención?
Que tengas un buen día.
Comentarios
Publicar un comentario
Comparte tu opinión de manera responsable y evita el anonimato: Escribe tu nombre, el curso y tu cole gabrielista. Muchas gracias.