PERSONAS: Nosotros

Nosotros

Estamos afrontando acontecimientos excepcionales que están trayendo, para muchos, consecuencias personales trágicas y penosas. Por eso, aun con todo lo que estamos pasando –que ya es mucho–, debemos ser capaces de encontrar un pequeño hueco en nuestro día a día para levantar la cabeza, recuperar la mirada y poner a nuestro corazón en perspectiva. Ponerse a punto para “lo nuevo” que está por llegar. El día D, el día en el que podamos retomar nuestra rutina, está hoy más cerca que ayer. Un encuentro con nuestros amigos, dar un simple paseo por la calle, ir a un concierto o salir a cenar, ir a una pastelería, salir de compras o bañarte en el mar. Todo eso a lo que hoy le damos mucho más valor que el que le dábamos hace unos días.

Y es que aún no somos conscientes, pero todo aquello que hagamos “por primera vez” cuando salgamos del confinamiento será emocionante. Lo viviremos de forma diferente, como una nueva sensación. Algo genuino. Hasta incluso inocente. Y en todo eso estará Él, que todo lo transforma y todo lo convierte. El Dios infinito que nos brinda otra oportunidad para empezar de cero. Para amar con pasión, para caminar dejando huella o para compartir con consciencia. Sentir nuestra vida como si todo ocurriera por primera vez. Será, al fin y al cabo, como volver a ser un niño. Y hoy estamos un poco más cerca de esta “nueva vida”, de la luz, de la alegría. Adap. Luis Hernanz@pastoralsj

¿Qué es lo primero que harás en tu día D?