Recordaremos al grupo que vamos a hacer un ejercicio de conciencia plena que consiste en observar y describir lo que sentimos, con curiosidad y sin juzgar. Hoy practicaremos mindfulness a través de la observación y la descripción de sonidos. Pediremos a los participantes que se pongan cómodos, sentados en una silla o en el suelo. Les explicaremos que haremos la actividad con los ojos cerrados e imaginaremos que nuestro oído es una radio que puede sintonizar diferentes emisoras. Entonces, durante la actividad, les pediremos que escuchen los sonidos que se oyen más lejanos; después, cambiaremos de emisora para escuchar sonidos más cercanos a la sala o el entorno donde estemos. Y finalmente, cambiaremos de nuevo de emisora para escuchar los sonidos del interior de nuestro cuerpo (la respiración, el latido del corazón, los huesos, el aparato digestivo, etc.). Indicaremos los cambios diciendo: «cambio a la emisora siguiente».
Podemos recordarles amablemente que, si notan que la atención se va del lugar donde deberían estar focalizados escuchando los sonidos, deben redirigir la mente al punto donde estaban. Pasados un par de minutos, diremos “stop” para finalizar la actividad.
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