Dicen que no se puede vivir sin un propósito. Si queremos ser personas con sentido y felices, es necesario encontrar aquello que da sentido a nuestra vida y nos impulsa a caminar hacia delante. Es lo que nos da la dirección, lo que saca de nosotros lo mejor y nos orienta en la vida con claridad respondiendo a la pregunta "para qué". Sentir que tenemos un propósito en la vida, una misión, nos hace ser y vivir siempre en camino, en la dirección que queremos y buscando siempre aquello por lo que merece la pena vivir. Para poder encontrarlo es necesario estar conectado con lo que nos apasiona e impulsa a seguir adelante con esfuerzo y constancia. Es centrarse en lo que somos y hacer que nuestra vida tenga sentido y significado.
Te invito a pensar cuáles son los pensamientos y sentimientos con los que te despiertas por las mañanas. Son un buen indicador de cómo estás y por dónde va tu vida. A cada uno de esos pensamientos dale una razón, un para qué...
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