“Incluso ahora, puedo sentirlo. Enterrado en algún lugar muy adentro. Mirándome. Esperando”.
- ¿Alguna vez has sentido que dentro de ti hay una parte que no entiendes del todo?
- ¿Has experimentado emociones tan intensas que te cuesta controlarlas?
- ¿Te has preguntado qué pasa cuando no enfrentamos lo que llevamos dentro?
- ¿Qué pasaría si escucharas más esa voz interior? ¿La ves como una amenaza?
Bruce representa esa lucha que muchos de nosotros vivimos: el miedo a perder el control, a mostrar lo que sentimos de verdad, a reconocer la fuerza que llevamos dentro. Pero también nos recuerda que no todo lo intenso debe ser destructivo. Quizás lo que nos asusta es, en realidad, un regalo todavía no descubierto. Por ejemplo, el pasado domingo celebramos Pentecostés, un día en que los discípulos también sentían miedo. De hecho, estaban cerrados, llenos de dudas e incertidumbre. Pero algo cambió cuando recibieron la fuerza del Espíritu Santo, una fuerza que envió a Dios para guiarles y darles las fuerzas necesarias desde su interior. ¿Y si ese Espíritu también está esperando en silencio tu sí? Y si ese regalo también es para ti, ¿te dejarás transformar?
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