Hoy hablamos de justicia y caridad. El vídeo propone unos roles donde cada persona, por el hecho de sentarse en una silla u otra, goza de ciertos privilegios o no. Tal vez si echamos una mirada a gran escala, sea así, pero no sé si a veces ocupamos sillas diferentes según el lugar donde estemos, las personas con las que estemos, la conversación que estemos teniendo, etc. De hecho, me atrevo a decir que no hay nadie en el mundo que siempre esté en la silla de delante o de atrás, ya que siempre habrá momentos en la vida en los que puedas estar en una posición u otra. Creo que el peligro que refleja este juego en la vida real es que siempre acabemos mirando al de delante con el deseo de ser como él y al de atrás pensando: "qué pena..." pero sin hacer nada.
Ojalá cuando veamos una injusticia a nuestro alrededor, por pequeña que sea, podamos actuar como el buen samaritano, o como el último hombre del vídeo, que al ver lo que no es correcto, hace lo posible para cambiar esa realidad y ayudar sin pedir nada a cambio, por amor, por caridad.
Bonus: Caridad no es simplemente ayudar, sino ayudar porque reconoces en el otro su dignidad humana o, como decimos los cristianos: porque en el otro reconozco que Dios está, habita, somos hermanos en la fe (crea o no).
Deseamos un buen día. Los compis de 2º de diver ;)
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