Foto de Ylanite Koppens
¡Buenos días!
Hoy iniciamos un nuevo espacio llamado "Palabras Sagradas" donde hablaremos de esas palabras que se utilizan a menudo para hablar de espiritualidad, fe y cristianismo. Hoy empezaremos por una palabra bien conocida: el amor. ¿Sabías que el amor no es solo un sentimiento o una emoción? El amor, o amar, es una forma de vivir, que consiste en cuidar, respetar y querer el bien del otro, incluso cuando no nos resulta fácil. El amor es una fuerza que transforma, que también nos transforma, y nos ayuda a conectar con las personas de forma sincera y profunda.
Si miramos a Jesús veremos que quiere enseñar un amor aún mayor. Un amor que cuida a todas las personas, sin mirar quiénes son ni qué pueden darnos. El amor cristiano no es solo sentir, sino actuar: hacer cosas concretas, gestos que muestren que nos importan los demás. Este amor es exigente porque pide entregarse y darse, hasta el final, a las otras personas, incluso cuando estas lo rechazan.
- ¿Cómo muestras amor a tus amigos, a tu familia o incluso a personas que no conoces demasiado?
- ¿Qué significa para ti amar sin esperar nada a cambio? ¿Cómo te sientes cuando alguien te ama así, sin condiciones?
- ¿Se puede amar al que no te ama? ¿Y a la persona que te ha hecho daño o te está haciendo daño?
Amar no siempre es fácil, a veces requiere esfuerzo y valentía. Pero cuando intentas amar de manera generosa y sin esperar nada a cambio, te acercas a la forma en que Jesús ama. Aun así, sabemos que amar de manera incondicional no siempre es fácil y si ya hablamos de amar a los enemigos... se nos hace un nudo en el estómago, ¿verdad? Y a ti, ¿qué te mueve a amar a los demás de forma incondicional? ¿Crees que Jesús podría ayudarte a amar con más profundidad?
Que tengas un buen día.
Comentarios
Publicar un comentario
Comparte tu opinión de manera responsable y evita el anonimato: Escribe tu nombre, el curso y tu cole gabrielista. Muchas gracias.